Real Madrid 0-5 FC Barcelona: Manotazo de fútbol total en el Bernabéu

El 0-5 de la 1973/74 en el Santiago Bernabéu fue la victoria más gloriosa del FC Barcelona durante años. El conjunto dirigido por Rinus Michels arrolló al Real Madrid en su propio feudo mediante una avalancha de juego ofensivo. El ritmo vertiginoso impuesto por el Barça, que aumentó conforme avanzaba el partido, se llevó por delante a los de Molowny. Los goles de Asensi en dos ocasiones, Johan Cruyff, Juan Carlos y Cholo Sotil certificaron la toma del Bernabéu. Cruyff, con un gol y dos asistencias, lideró el 0-5 en el primer Clásico que jugó desde su fichaje por el Ajax. Manotazo de fútbol total. Baño blaugrana, debacle blanca. 

El Barça pisó el Bernabéu como el destacado líder de la Liga: 6 puntos de ventaja respecto al segundo, el Real Zaragoza. Encadenaba, además, una imponente racha de 16 jornadas invicto, coincidiendo con el debut de Cruyff empezado el curso. Después de ganar tres Copas de Europa con el Ajax, Johan volvió a coincidir con Michels, su mentor en el Ajax, y el Barça desprendía una aureola indestructible. Muy diferente era la situación del eterno rival. Séptimo clasificado, más cerca del descenso (5 puntos) que del Barcelona (9 puntos). Cuatro jornadas antes del Clásico, tras la derrota ante el Castellón en Castalia, Santiago Bernabéu cesó a Miguel Muñoz (el legendario técnico de las seis Copas de Europa llevaba 14 años en el cargo) y Luis Molowny afrontó su primera experiencia en el banquillo merengue. El Mangas se hacía cargo del equipo hasta final de temporada a la espera de Miljan Miljanić para la siguiente. 

Molowny salió ante el Barcelona con García Remón; Morgado, Benito, Pirri, Rubiñán; Aguilar, Zoco, Velázquez, Netzer, Macanás; y Amancio. El joven Santillana (21 años en febrero de 1974) se quedó en el banquillo y salió tras el descanso con 0-2, sin poder evitar la hecatombe. Amancio, por lo tanto, actuó de inicio como hombre más adelantado. Amancio, Velázquez y Zoco eran los únicos supervivientes del Madrid de los Yeyés campeones de la Copa de Europa en 1966. Por su parte, Michels alineó a Mora; Rifé, Torres, Costas, De la Cruz; Marcial, Juan Carlos, Asensi; Rexach, Cruyff y Sotil. El histórico once del 0-5. Pere Valentí Mora debutó en partido oficial en este Clásico. El portero sustituyó a Sadurní, lesionado en el codo. Estreno de ensueño para Mora: "Mi alegría no se puede describir al coincidir mi debut con esta fenomental victoria. El 0-5 que veía en el marcador me parecía inverosímil. Todas las líneas funcionaban y el portero debía participar en la seguridad de todo el equipo". 

Por el Bernabéu pasó el mejor Barça de la era Michels. Las estadístican no engañan: cinco goles y media docena de ocasiones por una sola del Madrid, amén de los goles anulados (uno para cada equipo). Hacía más de 30 años que el Madrid no perdía por un resultado así en su campo, por lo que las reacciones blaugranas fueron de plena satisfacción. Agustí Montal: "Este 17 de febrero quedará como una fecha histórica. No recordaba un partido tan completo. Ha sido un recital". Rifé: "Hemos ganado 0-5 como podríamos haberlo hecho 0-8. De la Cruz: "Parece como si flotáramos: alguno me ha pellizado para ver si estabámos despiertos". Asensi: "La goleada de escándalo no la esperábamos. Como en el toreo, hemos practicado todas las artes". Costas: "La humillación en el Bernabéu no se veía desde hace tiempo. El Barça lo ha hecho con naturalidad porque su estilo es avasallador". 

El Barça arrasó, aunque antes soportó el típico arreón de un Madrid que se jugaba su última baza por el título. De hecho, antes del resto de goles, pudo llegar el 1-0. Manolo Velázquez desperdició una ocasión clara –la primera del partido– con todo a favor para marcar. Era la fase de tanteo, en la que un rocoso Barcelona aplicó al Real Madrid un férreo marcaje y la táctica del fuera de juego (Torres o Costas daban la consigna y toda la defensa avanzaba en bloque hasta dejar en off side a los blancos). La escuadra de Molowny, por su parte, insistió por la izquierda, donde Macanás y Rubiñán ponían las ganas de la juventud por agradar. La vieja guardia, en cambio, acusó el paso del tiempo. Intrascendentes Amancio, Velázquez, Zoco y Netzer. Se esperaba con especial interés el careo Netzer-Cruyff en la temporada que la Delegación Nacional de Deportes abrió de nuevas las fronteras, permitiendo dos plazas de extranjeros (el Madrid fichó a Netzer y Pinino Mas, el Barcelona a Cruyff y Cholo Sotil). El duelo entre Cruyff y Netzer se saldó también como el partido. Con goleada favor de Cruyff. El mejor jugador del mundo participó en tres de los cinjco goles. El alemán, por contra, pasó de puntillas. No fue el gran jugador del Borussia Mönchengladbach.

El Barça maduró el partido con la inteligencia del campeón. Desgastó al Real Madrid hasta desencadenarle la humillación: "Los cinco goles son justos y precisos. El Madrid ha tenido la mala suerte de encontrarse con el mejor Barcelona. Fuimos implantando nuestro ritmo conforme avanzó el partido. Era demasiado alto para el rival" declaró Rinus Michels, el padre del fútbol total. La clave estuvo en el ritmo. También en la superioridad en el centro del campo y la inteligencia a la hora de jugar entre líneas. Cruyff, como falso nueve, sacó a Goyo Benito de su zona, lo que dio vía libre para las entradas desde atrás. Cruyff dirigió y le acompañaron Marcial, Asensi, Rexach y Sotil. Asensi y Cruyff iniciaron el festival en la recta final del primer tiempo. Marcial dejó clavado a Netzer en la derecha, la puso al primer palo y Asensi marcó el 0-1 en el minuto 31. Los cañones, prestos y dispuestos, ya no cesaron. Cruyff marcó el 0-2 en el minuto 39. Regateó a Benito y Rubiñán y batió por debajo a García Remón. Golazo. Habilidad, elegancia. Tan Johan. El Holandés Volador ya vivió una manita la temporada pasada: "Ganamos los del Ajax a los del Feyenoord en su casa 1-5, pero esta es más grande". Después del segundo, Marcial marcó al filo del descanso el que hubiese sido el tercero. El árbitro Orrantia Capelastegui lo anuló por fuera de juego. Marcial acabó lesionado (Tomé le sustituyó en la segunda parte), pero mientras estuvo en el campo fue de lo mejor. 

El líder jugó a mayor velocidad después del descanso (algo común de los equipos de Michels en las segundas partes). El ritmo. Las camisetas azulgranas volaban mientras las blancas se desfondaban persiguiéndolas. Los de Molowny tuvieron problemas a la hora de rebasar el centro del campo, incapaces de parar la estampida de fútbol total. "Hemos fallado en la anticipación, cosa que han aprovechado. Los problemas estuvieron antes de llegar al área" declaró el técnico madridista. El Madrid estaba en manos del Barcelona y Asensi sentenció en el minuto 53 en una gran acción individual en la que dejó sentados a Zoco y Benito. Bigoleador el alicantino, quien aportaba un buen puñado de goles por temporada: "Estoy contento por los dos goles porque han sido muy bonitos, como todos los que hemos marcado". El Madrid, por su parte, estaba KO. Solo aguantaron el tipo Macanás, García Remón, Pirri y poco más. Sin embargo, siguió buscando, al menos, el gol del honor. Macanás lo logró después del 0-3, pero Orrentia lo anuló. A cero como la fría noche madrileña de febrero. 

Cruyff redondeó su clase magistral dando las asistencias del 0-4 y el 0-5. Primero el pase a la espalda de la defensa y la tremenda definición de parábola de Juan Carlos en el minuto 65 y, cuatro minutos después, el servicio de falta lateral y el cabezazo inapelable de Sotil al fondo de las mallas de un García Remón que no pudo hacer nada en los cinco goles encajados. El quinto lo gritó Perú. El partido, además de ser televisado por TVE, también fue retransmitido por Radio El Sol en el país de Sotil: "Todo el pueblo peruano se ha enterado de nuestra victoria. Para mí es un orgullo haber ganado al Madrid en el Bernabéu. Estos partidos de rivalidad son muy difíciles y vencer de una manera tan clara y merecida tiene un valor incalculable". Incluso la afición blanca, que miró al palco con algunos gritos al viejo presidente Santiago Bernabéu, se rindió al futuro campeón de Liga: "En el Bernabéu no se ha jugado tan bien desde que se retiró Di Stéfano". El mejor homenaje a la oda al fútbol de los de la Ciudad Condal. 

El 0-5 tuvo un tremendo impacto. Retumbó en los distintos medios informativos. Marca: "El Madrid en manos del Barcelona: Un pelele". As: "En el Bernabéu festival azulgrana". Diario de Barcelona: "Pentagoleada al hexacampeón de Europa". Dicen: "Una mano de goles". El periodista Antonio Hernández escribió estas líneas en Dicen: "Hacía años que no veíamos a un conjunto tan perfecto en todas sus líneas, particularmente en las ofensivas. El Barcelona de Cruyff es un equipo que pasará a la historia aunque solo sea por este encuentro. Vencer 0-5 a todo un Real Madrid en su propio feudo es algo insólito y que no recuerdan ni los más viejos del lugar". El Barça acumulaba 14 años sin ganar la Liga, desde 1960 en tiempos de Luis Suárez Miramontes, y salió casi campeón del Bernabéu; el Real Madrid, por el contrario, quedó fuera de la carrera por el título al quedarse a 11 puntos del líder. El Barça cantó el alirón a cinco jornadas del final ante el Sporting en El Molinón. Por otra parte, madridistas y culers volvieron a enfrentarse esa misma temporada en la final de la Copa. El Madrid se vengó y goleó 4-0 al Barcelona con goles de Santillana, Rubiñán, Aguilar y Pirri. El Barça acusó el cansancio de las semifinales contra el Atlético, prórroga incluida, además de las bajas de Cruyff y Sotil (los extranjeros no podían jugar la competición del KO). Siempre quedará, por supuesto, la Liga con ese inolvidable manotazo de fútbol total en el Bernabéu.